Luego de los lamentables fenómenos meteorológicos Ingrid y Manuel que azotaron varios Estados de la República, parece que comienzan a esbozarse los daños políticos.
Fue muy desafortunado conocer la fotografía del festejo en la noche del viernes 13 de septiembre, en la que departía el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, con integrantes de la clase política guerrerense, en cuyo marco para la imagen sobresale un mariachi conformado por al menos 9 músicos, además de la vocalista, en la que no parecen tener sobre salto alguno, cuando
El gobierno de guerrero dice que no se trató de una fiesta, sino una cena en el marco de los festejos del bicentenario de la instalación del Primer Congreso de Anáhuac en la catedral Santa María de la Asunción, donde José María Morelos proclamó los Sentimientos de la Nación.
Por otra parte, muy lamentable ha sido conocer que el gobierno del Estado de México facilitó un helicóptero a la conductora de televisión Laura Bozzo, con el presunto propósito de llevar ayuda a las zonas afectadas, pero fue desmentida por el presidente municipal de Coyuca de Benítez, Ramiro Ávila Morales, quien abandonó el lugar tras darse cuenta de que era sólo un espectáculo televisivo y la aeronave se negó a llevar víveres a las zonas más dañadas.
En su programa de radio, la periodista Carmen Aristegui dio cuenta del reportaje de la revista Proceso en el que evidenciaba a la conductora Laura Bozzo, quien en un mensaje televisivo desde su programa y con formas majaderas, objetó lo informado por Aristegui, a quien ha pedido incluso derecho de réplica. Bozzo ha sido sujeta de severas críticas en redes sociales, que van desde la descalificación de dichos actos, hasta la burla y la ofensa.
Como usted sabe, Aristegui y Bozzo encabezan un periodismo de distintos géneros: Carmen ejerce el periodismo de investigación y crítica, que en términos de comunicación política es conocido como círculo rojo, mientras la también llamada señorita Laura realiza un periodismo de espectáculo, con morbo, dedicado a presentar y mediar en situaciones de desgracia o infortunio personal o familiar y dirigido a una audiencia que sin más consume dicha información, conocida como círculo verde.
No obstante lo anterior, el gobierno federal y el gobierno de guerrero no han presentado pruebas, el primero de haber avisado y el segundo de ordenar desalojo de la población, lo que ha provocado un alud de críticas, por la falta de sensibilidad, sumado a la imagen y al mensaje proyectados por la imagen del festejo citado. Sobre el primer caso, la responsabilidad le es atribuida al Coordinador de Protección Civil del gobierno federal, Luis Felipe Puente; en el segundo, la opinión pública trata de involucrar al gobernador guerrerense.
Esto impacta la economía nacional. La agencia de calificación de riesgo Moody’s afirma que el gasto necesario para enfrentar los desastres provocados por las lluvias es tan grande, que México está en un aprieto económico, el cual, podría bajar su calificación.
Hay testimonio de la falta de aviso. A las 6pm de ese día el periodista Luis Flores Lonazkuo, de la emisora ABC Radio, difundía mensajes de auxilio “No conozco ninguna alerta de autoridades federales, estatales o municipales. Me orienté por las imágenes del meteorológico, llamé a los colegas de las diferentes regiones y supuse que la situación sería mucho más grave que la ocasionada por el huracán Paulina (octubre 1997). Entonces pedí permiso a la gerencia de la estación para interrumpir los programas cotidianos y darle voz a la gente. Tengo grabadas más de 700 llamadas de auxilio”, dice en entrevista telefónica y difundida por la revista Proceso, lo que demuestra la grave irresponsabilidad de ambas instancias.
Falta mencionar la deficiencia en la construcción de la autopista del sol, el otorgamiento de permisos de construcción en el cauce natural de las corrientes de agua, los daños en Veracruz, Tamaulipas, Sinaloa, Michoacán, Sinaloa, Oaxaca, Guerrero, por citar.
Resaltan varios temas. El primero tiene que ver con la falta de preparación de autoridades y población civil para enfrentar desastres naturales; el segundo se refiere a la insensibilidad de autoridades en minimizar las advertencias por el paso de fenómenos hidrometeorológicos; luego, sale a relucir el uso de recursos públicos con fines distintos a la ayuda; la permisibilidad de la autoridad para que parte de la agenda de una tragedia sea llevada por un programa de televisión o su medio de comunicación y sin autoridad moral de exigir un derecho a los demás, cuando es el primero en violarlo.
Todo lo anterior, para que la autoridad enmarque a la prevención y apoyo a la población, en las políticas de seguridad nacional.
Fue muy desafortunado conocer la fotografía del festejo en la noche del viernes 13 de septiembre, en la que departía el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, con integrantes de la clase política guerrerense, en cuyo marco para la imagen sobresale un mariachi conformado por al menos 9 músicos, además de la vocalista, en la que no parecen tener sobre salto alguno, cuando
El gobierno de guerrero dice que no se trató de una fiesta, sino una cena en el marco de los festejos del bicentenario de la instalación del Primer Congreso de Anáhuac en la catedral Santa María de la Asunción, donde José María Morelos proclamó los Sentimientos de la Nación.
Por otra parte, muy lamentable ha sido conocer que el gobierno del Estado de México facilitó un helicóptero a la conductora de televisión Laura Bozzo, con el presunto propósito de llevar ayuda a las zonas afectadas, pero fue desmentida por el presidente municipal de Coyuca de Benítez, Ramiro Ávila Morales, quien abandonó el lugar tras darse cuenta de que era sólo un espectáculo televisivo y la aeronave se negó a llevar víveres a las zonas más dañadas.
En su programa de radio, la periodista Carmen Aristegui dio cuenta del reportaje de la revista Proceso en el que evidenciaba a la conductora Laura Bozzo, quien en un mensaje televisivo desde su programa y con formas majaderas, objetó lo informado por Aristegui, a quien ha pedido incluso derecho de réplica. Bozzo ha sido sujeta de severas críticas en redes sociales, que van desde la descalificación de dichos actos, hasta la burla y la ofensa.
Como usted sabe, Aristegui y Bozzo encabezan un periodismo de distintos géneros: Carmen ejerce el periodismo de investigación y crítica, que en términos de comunicación política es conocido como círculo rojo, mientras la también llamada señorita Laura realiza un periodismo de espectáculo, con morbo, dedicado a presentar y mediar en situaciones de desgracia o infortunio personal o familiar y dirigido a una audiencia que sin más consume dicha información, conocida como círculo verde.
No obstante lo anterior, el gobierno federal y el gobierno de guerrero no han presentado pruebas, el primero de haber avisado y el segundo de ordenar desalojo de la población, lo que ha provocado un alud de críticas, por la falta de sensibilidad, sumado a la imagen y al mensaje proyectados por la imagen del festejo citado. Sobre el primer caso, la responsabilidad le es atribuida al Coordinador de Protección Civil del gobierno federal, Luis Felipe Puente; en el segundo, la opinión pública trata de involucrar al gobernador guerrerense.
Esto impacta la economía nacional. La agencia de calificación de riesgo Moody’s afirma que el gasto necesario para enfrentar los desastres provocados por las lluvias es tan grande, que México está en un aprieto económico, el cual, podría bajar su calificación.
Hay testimonio de la falta de aviso. A las 6pm de ese día el periodista Luis Flores Lonazkuo, de la emisora ABC Radio, difundía mensajes de auxilio “No conozco ninguna alerta de autoridades federales, estatales o municipales. Me orienté por las imágenes del meteorológico, llamé a los colegas de las diferentes regiones y supuse que la situación sería mucho más grave que la ocasionada por el huracán Paulina (octubre 1997). Entonces pedí permiso a la gerencia de la estación para interrumpir los programas cotidianos y darle voz a la gente. Tengo grabadas más de 700 llamadas de auxilio”, dice en entrevista telefónica y difundida por la revista Proceso, lo que demuestra la grave irresponsabilidad de ambas instancias.
Falta mencionar la deficiencia en la construcción de la autopista del sol, el otorgamiento de permisos de construcción en el cauce natural de las corrientes de agua, los daños en Veracruz, Tamaulipas, Sinaloa, Michoacán, Sinaloa, Oaxaca, Guerrero, por citar.
Resaltan varios temas. El primero tiene que ver con la falta de preparación de autoridades y población civil para enfrentar desastres naturales; el segundo se refiere a la insensibilidad de autoridades en minimizar las advertencias por el paso de fenómenos hidrometeorológicos; luego, sale a relucir el uso de recursos públicos con fines distintos a la ayuda; la permisibilidad de la autoridad para que parte de la agenda de una tragedia sea llevada por un programa de televisión o su medio de comunicación y sin autoridad moral de exigir un derecho a los demás, cuando es el primero en violarlo.
Todo lo anterior, para que la autoridad enmarque a la prevención y apoyo a la población, en las políticas de seguridad nacional.
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